Cigarrillos electrónicos: generaciones, ventajas y preocupaciones

Joji Suzuki, M.D.

Director de Division of Addiction Psychiatry
Department of Psychiatry,
Brigham and Women’s Hospital;
Profesor asistente de psiquiatría,
Harvard Medical School

• Los cigarrillos electrónicos son más seguros que los cigarrillos, pero siguen teniendo riesgos.
• Los médicos y pacientes deben saber sobre la enfermedad pulmonar relacionada con el vapeo.
• Los cigarrillos electrónicos pueden ser una buena estrategia para dejar de fumar, con una eficacia comparable a la NRT.

Ahora hablemos sobre los cigarrillos electrónicos. ¿Valen la pena?

Los cigarrillos electrónicos aparecieron en los últimos diez años. Han tenido una gran evolución ya que han cambiado bastante. Los primeros eran muy sencillos y poco funcionales. Liberaban nicotina de forma ineficiente, la batería era de corta duración y tenían un único voltaje. Después aparecieron los de segunda generación, con baterías más grandes, cartuchos recargables, liberación de nicotina más eficiente, mayor duración de la batería y voltaje regulable. Por último, tenemos los de tercera generación. Estos vaporizadores son más avanzados y personalizables, liberan la misma cantidad de nicotina que los cigarrillos convencionales, son regulables y recargables. Por ello se han vuelto muy populares.

En lo que respecta a dejar de fumar, los cigarrillos electrónicos tienen algunas ventajas. Se consideran un buen reemplazo de los cigarrillos de tabaco. El director de Office on Smoking and Health de los CDC en Estados Unidos manifestó que hay suficiente evidencia para afirmar que muy probablemente sea más saludable cambiar de los cigarrillos de tabaco a los electrónicos. Además, algunos estudios sugieren que pueden ayudar a dejar de fumar.

El mejor ensayo aleatorizado realizado hasta la fecha fue publicado en el New England Journal of Medicine en 2019. Fue un ensayo aleatorizado controlado de casi 1000 fumadores en el Reino Unido. Los participantes fueron aleatorizados a cigarrillos electrónicos o una terapia de reemplazo de nicotina. El resultado principal fue un año de abstinencia bioquímica. En el grupo que recibió cigarrillos electrónicos la tasa de abstinencia al año fue del doble que la del grupo con NRT. El grupo con cigarrillos electrónicos tuvo una tasa de abstinencia del 20 % y el grupo con NRT del 10 %. No se observó diferencia alguna en la incidencia de sibilancias, problemas respiratorios u otras condiciones asociadas con los cigarrillos electrónicos.

Ahora bien, también existen algunas preocupaciones y desventajas asociadas a su uso. Hay muchas personas a quienes los cigarrillos electrónicos no les ayudan a dejar de fumar. De hecho, pueden hacer que las personas se vuelvan fumadoras duales. Es decir, que sigan fumando y además usen los cigarrillos electrónicos cuando no pueden fumar tabaco. El resultado es una mayor exposición a la nicotina, lo cual es peor. Estos dispositivos se pueden modificar para liberar otro tipo de sustancias como THC, psicodélicos u otras drogas. Además, pueden ser utilizados por los jóvenes y probablemente esa es la mayor preocupación, ya que la prevalencia del vapeo y el uso de los cigarrillos electrónicos se ha disparado en los últimos cinco a diez años. Actualmente, el cigarrillo electrónico es el producto de tabaco o nicotínico más utilizado por los jóvenes.

Además, cada vez se reportan más casos de lesiones pulmonares relacionadas con el vapeo. Por lo general, se asocian al uso de productos ilícitos, en particular aquellos con THC. Pero hasta ahora no se sabe cuál es la causa exacta. Las personas con este tipo de lesiones han reportado el uso de cigarrillos electrónicos para vapear, y por otra parte los estudios de imagen descartan la presencia de causas infecciosas así como otros posibles diagnósticos alternativos. La recomendación actual de los CDC es evitar por completo el uso de los vaporizadores. Algunos estados han llegado a prohibir los saborizantes que se utilizan en estos productos, porque se cree que son la causa de las lesiones relacionadas con el vapeo. Entonces, la recomendación actual es evitar por completo el uso de vaporizadores y por supuesto el de los saborizantes.

Puede que los cigarrillos electrónicos ayuden a dejar de fumar o a reducir el consumo de tabaco, pero los datos demuestran que si los jóvenes los utilizan para vapear, aumenta la probabilidad de que más adelante fumen tabaco. Esto es lo opuesto al éxito logrado en la disminución del tabaquismo en Estados Unidos. De hecho, la introducción de los cigarrillos electrónicos podría comenzar a revertir ese logro. La información de los CDC sugiere que en Estados Unidos, al menos un tercio de los estudiantes en el último año de secundaria han practicado el vapeo en el último año. Y hasta uno de cada cinco estudiantes en el último año de primaria han intentado vapear en el último año. Así que esto es un problema emergente y una gran preocupación.

Los puntos clave. Los cigarrillos electrónicos de un fabricante legal pueden ser más seguros que fumar, pero siguen teniendo riesgos. Los médicos y pacientes deben saber sobre la enfermedad pulmonar relacionada con el vapeo. Los cigarrillos electrónicos pueden ser una buena estrategia para dejar de fumar, comparable con la NRT.

Referencias

• Wagener, T. L., Floyd, E. L., Stepanov, I., Driskill, L. M., Frank, S. G., Meier, E.,… & Queimado, L. (2017). Have combustible cigarettes met their match? The nicotine delivery profiles and harmful constituent exposures of second-generation and third-generation electronic cigarette users. Tobacco control, 26(e1), e23-e28.

• Hajek, P., Phillips-Waller, A., Przulj, D., Pesola, F., Myers Smith, K., Bisal, N.,… & Ross, L. (2019). A randomized trial of e-cigarettes versus nicotine-replacement therapy. New England Journal of Medicine, 380(7), 629-637.

• Caponnetto, P., Saitta, D., Sweanor, D., & Polosa, R. (2015). What to consider when regulating electronic cigarettes: pros, cons and unintended consequences. International Journal of Drug Policy, 26(6), 554-559.

• Perrine, C. G., Pickens, C. M., Boehmer, T. K., King, B. A., Jones, C. M., DeSisto, C. L.,… & Landen, M. G. (2019). Characteristics of a multistate outbreak of lung injury associated with e-cigarette use, or vaping—United States, 2019. Morbidity and Mortality Weekly Report, 68(39), 860.